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El futuro puente se construirá, como pronto, desde 2011
La estructura salvará con un solo vano 128 metros, y dejará el actual puente como peatonal.
Pamplona. No será en breve, pero la entrada norte de Pamplona contará con nuevo puente de Cuatrovientos, "monumental y simbólico, pero también funcional y útil", que liberará al actual de todo el tráfico rodado y, a la vez, embocará una nueva avenida de Guipúzcoa, diseñada por la trasera del convento de las Oblatas y dejando la ribera del Arga como continuación del parque fluvial. El coste del nuevo puente se cifra en cinco millones de euros, y en ningún caso se empezará a construir antes de 2011.
De momento, ya se sabe cómo será, según el diseño adjudicado a los estudios Sertecna (Pamplona) y FHECOR (Madrid), que ahora deberán redactar el proyecto definitivo en ocho meses por un precio de 350.000 euros. La presentación corrió a cargo de José Romo y Hugo Corres, de FEHCOR, aunque Santiago Sáinz de los Terreros (Sertecna) también explicó algunos pormenores.
Todos destacaron el carácter "emblemático" de un proyecto denominado Puerta Eslabón, que salvará el cauce del Arga unos 80 metros agua abajo (hacia San Jorge) del actual puente de Cuatrovientos, pero no exactamente en paralelo. "Contará con un sólo vano diáfano de 128 metros de longitud, con los dos estribos apoyados en seco", detalló Romo. El nuevo puente tendrá una anchura de 30 metros, pero aún no se ha determinado si contará con dos o tres carriles por sentido.
En una lectura más teórica del proyecto, Hugo Corres destacó "los numerosos guiños funcionales, culturales e incluso históricos del futuro puente; por ejemplo, el gran pórtico triangular que se eleva por encima del puente tiene la misma altura que la nave central de la Catedral de Pamplona". Aparte de esta buscada coincidencia, tanto Corres como Romo destacaron que "un ranurado en el piso del puente dejará pasar mucha luz al parque fluvial que continuará por debajo de la calzada; además, el gran vano de 128 metros de longitud permitirá un espacio diáfano". En la misma línea, Romo recalcó la funcionalidad del puente: "no hay muchos elementos de adorno; es un diseño contenido".
El de ahora, peatonal en la práctica, el paseo peatonal por el parque fluvial (hoy interrumpido por la avenida de Guipúzcoa) tendrá por fin continuidad entre Rochapea y San Jorge. Por un lado, la actual avenida de Guipúzcoa se integrará en el parque como senda peatonal y ciclista, como recordó Enrique Maya, director municipal de Urbanismo. Así, el puente de Cuatrovientos recuperará su dimensión original eliminando el ensanchamiento de los años 60, obligado por el aumento del tráfico.
Los peatones que crucen el Arga por ese futuro puente peatonal podrán salvar el nuevo Cuatrovientos por un voladizo bajo la calzada, sin necesidad de cruzarla para acceder a la parte de parque fluvial de San Jorge.
Por otro lado, la ejecución del nuevo puente y de la futura rotonda de Cuatrovientos (la actual, además de provisional, resulta confusa y peligrosa) se podrá abordar sin tener que esperar a que se elimine la vía del ferrocarril. "Se ha tenido en cuenta para que, de momento, sean compatibles", explicó Maya.
Iván Giménez.noticiasdenavarra.com
